Los esguinces

En esta entrada de blog vamos a hablar sobre una lesión muy común en la práctica deportiva y en la vida diaria: los esguinces.

Los esguinces son lesiones de los ligamentos que unen los huesos de una articulación. Estas lesiones pueden variar en gravedad y pueden afectar a cualquier articulación del cuerpo, aunque son más comunes en los tobillos, rodillas y muñecas.

¿Cuáles son sus causas?

Generalmente son causados por una fuerza excesiva o un movimiento brusco que estira o desgarra los ligamentos. Algunas de sus causas comunes son:

– Torceduras en el tobillo: Los esguinces de tobillo son muy comunes en deportes que requieren giros, saltos o cambios de dirección repentinos, como el fútbol, el baloncesto y el vóley.

– Golpes en la rodilla: Los esguinces de rodilla pueden ser causados por golpes directos en la articulación o por cambios bruscos de dirección.

– Caídas en la muñeca: Los esguinces de muñeca son comunes en deportes que implican caídas, como el skate o el snowboard, o en actividades cotidianas como levantar objetos pesados.

¿Qué síntomas presentan?

Los síntomas pueden variar según la gravedad de la lesión. A continuación, enumeraremos y explicaremos los más comunes:

  1. Dolor en la articulación afectada: El dolor es el síntoma más común asociado con esta lesión. Este puede ser agudo o sordo, y puede sentirse en la articulación afectada o en áreas cercanas. Además, puede empeorar con la actividad física o con la presión directa sobre la zona afectada.
  2. Hinchazón y enrojecimiento en la zona: La acumulación de líquido en la zona afectada puede causar inflamación y hacer que la articulación se sienta caliente al tacto.
  3. Hematomas: Los esguinces pueden causar hematomas en la zona afectada. Los hematomas son causados por la ruptura de pequeños vasos sanguíneos y pueden causar decoloración de la piel.
  4. Dificultad para mover la articulación y limitación del movimiento: Estas lesiones pueden limitar el movimiento de la articulación afectada, lo que puede ser el resultado del dolor,  la hinchazón o la debilidad muscular.
  5. Debilidad muscular en la zona afectada: La debilidad puede ser el resultado de la lesión en sí misma o como resultado del dolor y la limitación del movimiento.
  6. Sensibilidad al tacto: Los esguinces pueden hacer que la zona afectada sea sensible al tacto. Esto puede ser el resultado de la inflamación o la irritación de los nervios cercanos a la lesión.
  7. Crepitación: En algunos casos, pueden causar crepitación en la zona afectada.

Es importante que los fisioterapeutas estén atentos a estos síntomas y realicen un examen completo para determinar la gravedad de la lesión y desarrollar un plan de tratamiento efectivo.

¿Qué tratamientos tienen?

Seguidamente, se describen algunos de los tratamientos más efectivos para los esguinces:

  1. Descanso y protección: El primer paso en el tratamiento es limitar la actividad y proteger la articulación lesionada. Para ello, puede ser necesario usar una férula o un vendaje para inmovilizar la zona afectada.
  2. Hielo: La aplicación de hielo en la articulación lesionada puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor. Se recomienda aplicar hielo durante 15-20 minutos, varias veces al día.
  3. Compresión: Se puede utilizar una venda elástica para comprimir la zona afectada ya que la compresión puede ayudar a reducir la hinchazón y la inflamación.
  4. Elevación: Elevar la zona lesionada por encima del nivel del corazón puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor.
  5. Ejercicios de movilidad: Una vez que la inflamación y el dolor han disminuido, se pueden realizar ejercicios de movilidad para ayudar a restaurar el rango de movimiento y la fuerza en la articulación lesionada.
  6. Ejercicios de fortalecimiento: Una vez que la articulación ha comenzado a sanar, se pueden realizar ejercicios de fortalecimiento para ayudar a prevenir futuras lesiones y mejorar la función de la articulación.
  7. Masaje: El masaje puede ayudar a aliviar la tensión muscular y mejorar la circulación en la zona afectada.
  8. Terapia física: Si el esguince es grave, puede ser necesario trabajar con un fisioterapeuta para diseñar un plan de tratamiento completo que incluya ejercicios específicos de rehabilitación y técnicas de terapia manual.

En conclusión, el tratamiento de los esguinces puede variar dependiendo de la gravedad y la ubicación de la lesión. Sin embargo, los tratamientos mencionados anteriormente son algunos de los más efectivos para ayudar a aliviar el dolor, reducir la inflamación y restaurar la función de la articulación afectada. Como fisioterapeutas, es importante conocer y aplicar estos tratamientos de manera adecuada para ayudar a los pacientes a recuperarse completamente de sus lesiones.

¿Cómo prevenirlos?

A continuación, enumeramos algunas formas de prevenir los esguinces:

  1. Estiramiento y calentamiento antes del ejercicio: Es importante estirar y calentar los músculos antes de hacer ejercicio para evitar lesiones. Estos deben centrarse en las áreas que se utilizarán durante el ejercicio, como los tobillos, las rodillas y las muñecas.
  2. Fortalecimiento muscular: Mantener los músculos fuertes y flexibles es una excelente manera de prevenir lesiones. El fortalecimiento muscular a través de ejercicios de resistencia puede mejorar la estabilidad articular y reducir el riesgo de esguinces.
  3. Usar el equipo adecuado: Es de gran importancia usar el equipo adecuado para el deporte o actividad que se está realizando (zapatos, rodilleras, soportes…)
  4. Técnicas de caída: En los deportes de contacto, como el fútbol o el baloncesto, es importante aprender técnicas de caída para minimizar el impacto en las articulaciones.
  5. Descanso y recuperación: Después de un esfuerzo físico intenso, es importante permitir que el cuerpo descanse y se recupere.
  6. Estar atento a las señales de advertencia: Presta atención a las señales de advertencia de una posible lesión, como el dolor o la inflamación. De esta forma, es posible tomar medidas para prevenir una lesión mayor.
  7. Visitar al fisioterapeuta: Por último, pero no menos importante, visitar a un fisioterapeuta puede ayudarte a prevenir lesiones. Este profesional puede proporcionar asesoramiento sobre cómo prevenir lesiones, realizar evaluaciones de la marcha y ofrecer ejercicios específicos para fortalecer y estirar los músculos.

Conclusión

En conclusión, los esguinces son lesiones comunes que pueden afectar cualquier articulación del cuerpo.

Los fisioterapeutas tienen un papel importante en la recuperación de los esguinces ya que  pueden ayudar a los pacientes a recuperar la fuerza, la flexibilidad y la estabilidad de la articulación afectada a través de ejercicios específicos. También pueden utilizar técnicas de terapia manual y electroterapia para reducir la inflamación y el dolor en la zona afectada.

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